México lindo... Riviera Maya

Optamos ir a la Riviera Maya con uno de esos paquetes vacacionales con todo incluido, y la verdad, no me arrepiento. Llegas a la habitación y puedes disponer de todo el mueble-bar, comer a todas horas, bañarte en la piscina mientras disfrutas de un cocktail, bañarte en las paradisíacas playas del hotel sin tener que cargar con nada, etc. Eso sí, las excursiones las hicimos a nuestro aire y fue todo un acierto: haces lo mismo que en las contratadas en el hotel y te ahorras muchísimo dinero. Os cuento un poco el viaje: en la agencia contraté un menú sin gluten para el avión y no hubo el más mínimo problema (es más, comparado con el menú estándar salí ganando). Escogimos un hotel de la cadena RIU que contaba con cinco restaurantes diferentes para disponer de la máxima variedad posible en la comida. Al llegar al hotel me dirigí a la recepción y comenté cuál era mi problema. Inmediatamente, me presentaron a la señorita de recepción de los restaurantes y le notificaron mi enfermedad para que me tuviera fichada por si necesitaba ayuda. A continuación, me presentaron al comandante de cocina (allí cada uno tiene un rango…) y me dijeron que contactara con él para cualquier pregunta que me surgiera durante la estancia. Finalmente, me presentaron al chef y me estuvo informando sobre los platos que podía comer. Recuerdo que el comandante le sugirió que me hicieran pan artesano apto para mi, pero el chef dijo que el médico les había alertado que podían tener problemas de contaminación cruzada (vamos, que sabían de lo que iba el tema de la celiaquía…). Aún así, me ofrecieron la posibilidad de pedir verduras, carnes, etc. a la plancha. De todos modos no necesité pedir nada, había variedad de sobras: frutas, verduras, arroz, maíz, marisco, queso, tortillas de huevo, frijoles, carne y pescado a la plancha, y un largo etc. Me apodaron la “chica de las harinas” y no me faltó atención durante mi estancia. No me puedo quejar del trato que recibí.
En cuanto a la bebida, no encontré en ningún lugar cerveza apta para celíacos, pero tequils, piña colada, y daikiris los que queráis!!!
Respecto a las excursiones tampoco no hubo inconvenientes. Empezaba el día con un abundante desayuno, y como me llevé pan en la maleta lo rellenaba con comida del buffet por si no podía comer nada durante el día. A todas las excursiones que fuimos la comida estaba incluida y siempre había buffet libre (aunque con menos variedad que en el hotel). Aunque preguntaba lo que podía comer y lo que no, a veces no me fiaba demasiado y optaba por comer fruta y mi bocadillo. Al fin y al cabo, cuando llegaba al hotel había siempre un restaurante abierto para comer en cualquier momento, o sea que hambre no pasé. La mejor excursión que recuerdo fue a “playa paraíso”, cerca de Tulum. La hicimos por nuestra cuenta y como no es uno de los lugares que frecuentan las excursiones contratadas, al llegar estábamos en una playa paradisíaca casi solos. Además, pudimos comer pescado a la plancha tumbados en unas camas…fue increíble…

Conclusión: repetiría sin pensarlo.



















Montañas...

Cuando uno se prepara para hacer una ruta por la montaña la mochila se convierte en una de las mayores preocupaciones. Más aún si eres celíaco. Hay que cargar suficiente comida para pasar todos los días, pero sin excederse porque hay que vigilar el peso del equipaje. Un recurso fácil es cargar paquetes de embutido, quesos, frutos secos, papillas en polvo, barritas energéticas (Schär vende unas estupendas), pastillas de caldo de Mercadona y pan, aunque depende de la duración del viaje será necesario algo más.
Los montañistas saben que la comida deshidratada es la mejor opción en estos casos. En Expedition Foods ofrecen once productos deshidratados aptos para celíacos, con la posibilidad de comprarlos on-line. Encontraréis platos de ternera, pollo, arroz, natillas, etc. listos para ser mezclados con agua y comer. También la marca Trekking-mahlzeiten tiene algunos productos como pollo al curri con arroz, o huevos revueltos con cebolla. Los podéis comprar on-line en Barrabes. Existen otras marcas que también venden productos deshidratados sin gluten pensados para expediciones como Altiplano Gold, AlpineAire Foods, Lärabar, etc.
Tambien tenéis la opción de prepararos vosotros mismo la comida deshidratada e incluso las barritas energéticas .
Todos estos productos, por supuesto, pueden servir también para todos los “mochileros” que programen cualquier ruta de larga duración.

Cerdeña

Cerdeña es un paraíso en pleno mediterráneo. Sin embargo, no ofrece demasiadas posibilidades para los celíacos. Si tenéis pensado pasar más de una semana os aconsejo que elijáis un apartamento como alojamiento: será la opción más económica para pasar vuestras vacaciones. Además, como compraréis vosotros mismos los alimentos controlaréis mejor lo que coméis. Otra recomendación es que carguéis la maleta de productos sin gluten puesto que no abundan las tiendas que los venden.

Tiendas y supermecados
Durante mis vacaciones en Cerdeña visité la parte norte de la isla. Nuestro apartamento estaba ubicado en la ciudad del Alguero. A tan sólo unos metros teníamos el mercado local donde compramos todo tipo de productos frescos, en especial pescado. Cerca también había supermercados donde comprar. En el único donde pude encontrar productos específicos para celíacos fue en el Conad (en via Mazzini). En la farmacia del centro histórico yo no vi ni rastro de ellos…

Comida rápida
Lo más sencillo y económico para comer bueno, bonito y barato es que os preparéis vosotros mismos bocadillos para pasar el día. Para degustar algo diferente los podéis rellenar de bresaola, salami, etc. y otros productos típicos de venda en la mayoría de supermercados (pensar en mirar siempre el etiquetaje). Una buena opción para el postre son los granizados. En verano encontraréis unos “minibares” en forma de limón por todo el puerto del Alguero en los que preparan granizados con frutas naturales al momento. Con los helados hay que vigilar más…

Además, en Cerdeña existen algunos restaurantes específicos para celíacos, aunque ninguno de ellos se encuentra en el Alguero. Encontraréis un listado de todos ellos en la asociación de celíacos italiana. Os dejo también este link de la cadena DS Pizza Point que resulta muy útil para encontrar donde comer pizzas sin gluten en Italia y hasta da un ranking de su calidad. Yo me acerqué a un DS point cerca del Alguero, Le Iene en Sassari, y comí pizza acompañada de cerveza y de postre tiramisú, todo sin glutine.
Por supuesto siempre podréis ir a otros restaurantes y comer ensaladas, arroz, carne o pescado a la parrilla, e incluso la famosa langosta de la zona, aunque esta última barata, barata no es...

Lisboa


Había oído opiniones muy dispares sobre Lisboa, pero sin duda a mi me ha parecido una ciudad increíble. Respira modernidad, aunque conserva el encanto de siglos pasados, la gente es amabilíiiiiiisima y se desviven por ayudarte, y en cuanto a la comida ninguna queja.

Tiendas y supermercados
Como en España, en la mayoría de farmacias (Farmácias) y lo equivalente a las herboristerías (Ervanárias/Dietéticas) encontraréis productos sin gluten de casas especializadas. Os será fácil encontrar estos productos en tiendas Celeiro Dieta puesto que están por toda la ciudad. También podréis ir a los siguientes supermercados: Continente, El Corte Inglés, Jumbo, Minipreço, Pingo Doce...

Comida rápida
Comer en Lisboa es bastante barato: el precio medio oscila entre los 7-10 euros, e incluye primer y segundo plato, postres, bebida y café. Así pues, no es muy complicado encontrar un buen sitio.
Único inconveniente: el tema de la celiaquía no es nada conocido. No intentéis explicar en qué consiste porque probablemente vuestro esfuerzo sea en vano…como mucho mencionar la palabra enfermedad y directamente dar una tarjeta con los productos que podéis comer y los que no. ¡Tener en cuenta que este consejo viene dado por la mismísima página de la asociación de celíacos de Portugal! Y no se equivocan…En la misma página de la asociación también encontraréis un listado de platos típicos teóricamente permitidos. Además podéis memorizar algunas palabras que os harán la vida más fácil: asado (grelhado/assado), maíz (milho), etc. Aquí van algunos sitios en los que comí a buen precio:

Por toda Lisboa encontraréis pastelerías-cafeteía-snack en los que hacen platos combinados por unos 5-6 euros, aunque hay que ir con cuidado porque hacen hay bastante “fritanga”…. En los que yo estuve pedí bistoque grelhado (bistec de ternera a la parrilla con huevo encima) y me lo sirvieron acompañado de arroz, ensalada y patatas. Por cierto, las batatas en Portugal suelen ser artesanas (nada de congeladas). Además lo rematé con arroz con leche (arroz doce) que en teoría es un postre apto para celíacos. Me aseguraron que la comida era gluten free y la verdad es que mi estómago no tuvo ninguna queja.

Una buena opción para tomar algo por la tarde es ir a la Alfama y tomar una copita de Ginjinha (licor de cereza, por 1 euro) mientras te relajas escuchando fados...

En esta ciudad debo que hacer de nuevo una mención especial al sr. McDonald’s de Portugal: en su carta, además de las ya conocidas patatas y ensaladas (por cierto, mucho mejores que las de España), también tienen sopas sin gluten, y es que los portugueses son grandes amantes de los caldos.
Por último, haré una mención especial a un restaurante en el que comí increíblemente bien: restaurante Tascardoso (rua seculo, 242). Es un local bastante minúsculo en el que podréis degustar la gastronomía tradicional a un precio excelente. Repetí dos veces. La primera noche cené: sardinas asadas, acompañadas de patatas hervidas, ensalada, aceitunas, queso tradicional, vino, y de postre melón. ¿Cuánto? 11 euros, y no pude terminar…El segundo día lo mismo, pero cambié las sardinas por carapaõ, que según el camarero es el “padre de la sardina” (yo todavía no he descubierto de que pescado se trata, la verdad…).


Volvería sin pensármelo...

París

París precisamente no es un paraíso para celíacos: el etiquetaje de los alimentos deja mucho que desear, los sitios donde poder comer sin gluten son escasos y caros, y la “gran simpatía” de los parisinos no suele resultar de mucha ayuda para aclararte con la comida (aunque hay de todo en todos los sitios…).

Tiendas y supermercados
Podréis encontrar comida sin gluten en farmacias (pharmacies) o tiendas dietéticas (magasins de produits de régime). Concretamente, en las tiendas Naturalia, con multitud de franquicias por toda la ciudad, encontraéis sobre todo bollería y pan de Dr. Schär, Sanavy, Glutabye, etc.; exactamente los mismos productos que encontramos en España. Otras tiendas parecidas son La Vie Claire y Biocoop.
Algunos supermercados, como Monoprix o Casino, tienen pan, galletas, madalenas, etc. sin gluten (buscar la marca allergo).

Comida rápida

La cosa está difícil…aunque veréis multitud de creperies, sitios donde comprar bocadillos y excelentes pastelerías, la verdad es que poca cosa es apta para celíacos. En teoría, los macarons (un tipo de dulce) son por naturaleza sans gluten aunque hay que ir con cuidado con la contaminación cruzada…Los de la confitería Ladurée son especialmente famosos; eso sí, son caros, por eso una opción más barata para el postre es comprar fruta fresca en cualquiera de las muchas frutería que hay en París. Seguramente, no os quedará más remedio que preparar vuestra propia comida o ir a un restaurante gastando un poco más.
Una buena opción en París son las omelletes (tortillas). Aunque las suelen preparar con los ingredientes que tú elijas (además del huevo, obviamente...), avisar de que sois celíacos. Eso sí, aunque probablemente será lo más barato que encontréis, la factura seguro que no baja de 10-15 euros....
También podéis visitar la web de la asociación de celíacos francesa con más información con restaurantes aptos para celíacos (sobre los 25-30 euros...). Son muy pocos los que hay, por eso si decidís ir a establecimientos fuera de la lista os recomiendo platos sencillos como entrecots y una especie de ensaladas que hacen donde añaden patatas fritas con ajo y perejil (¡¡buenísimas!!). Eso sí, avanzaros siempre y pedir todo sin salsa porque las ponen por todos los sitios... y por si a caso sin croutons (daditos de pan).

Barcelona

Empecemos por mi ciudad. En Barcelona existen muchas opciones para comer sin gluten por menos de 12 euros:

Tiendas y supermercados
Como en el resto de España, las cadenas de supermercados de el Corte Inglés, Hipercor, BonPreu, Carrefour, Eroski y Mercadona entre otros, cuentan con multitud de productos si gluten etiquetados debidamente. En especial, Eroski y Mercadona poseen numerosos productos de elaboración propia a buen precio, aptos para celíacos. Además, casi en todas las herboristerías y farmacias de la ciudad encontraréis productos sin gluten, aunque suelen ser más caros al tratarse de marcas específicas.

Comida rápida
Conesa. En este pequeño y céntrico local ubicado en la plaza St. Jaume, podréis degustar fabulosos bocadillos, ensaladas y cerveza Daura, todos ellos aptos para celíacos. Os recomiendo en especial el bocadillo de frankfurt con mostaza (son especialistas), el bocadillo de lomo con queso y el balaguer (butifarra catalana con queso). El precio medio de los bocadillos oscila alrededor de los 3.5 euros, ¡una auténtica ganga!
Viena. Esta cadena de establecimientos también cuenta con una carta especial de bocadillos, ensaladas, etc. sin gluten. En este caso, los bocadillos especiales para celíacos cuestan lo mismo que el resto ("los normales"). El precio medio aproximado por bocadillo es de unos 3 euros. Una recomendación: si pedís bocadillo fríos (por ejemplo de jamón serrano) pedir que os pasen el pan por la plancha, ¡están mil veces mejor! En la página web encontraréis más locales a lo largo de la geografía catalana y Andorra. En Barcelona los más céntricos están ubicados en las Ramblas y en la calle Pelayo.
Telepizza. Como en el resto de España, algunos establecimientos de esta caden ofrecen pizzas sin gluten de 4 quesos y jamón-bacon por 12 euros aprox. la mediana. Podréis encontrar las direcciones en su página web. Otros establecimientos como el VIPS Diagonal Mar e IKEA también ofrecen comida sin gluten a buen precio.
Una buena opción para el postre (o desayuno, merienda...) es visitar el mercat de la Boquería (en las Ramblas) y compraros unos "tápers" ya preparados con fruta variada. Además, en las pastelerías Sant Pere (calle tallers, 17) encontraréis increíbles pastelitos de chocolate (aprox. 3 euros).
Y por supuesto, recordad que siempre nos quedarán las ensaladas, hamburguesas (sin pan) o patatas de algunos McDonald's.

En cuanto a los restaurantes, podéis visitar la web de la asociación de celíacos de Cataluña donde encontraréis más información. Os recomiendo dos restaurantes: el "Tijuana", un mejicano donde podréis comer sin problema por unos 15 euros y el "Pizza Leggera" donde podréis elegir entre una de las 10 pizzas que ofrecen (también las hacen dulces) por unos 12 euros. ¡En ambos restaurantes tienen cerveza Daura!

Ah por cierto, recientemente me he enterado que en la nueva terminal (T1) del aeropuerto de Barcelona, en el restaurante APTC, cuentan con menú especial para celíacos: incluye croquetas, pizzas, bocadillos, empanada de bonito, calamares rebozados, caramelos…en fin, ¡un menú digno! Estoy deseando probarlo y contaros…¿alguien lo ha hecho ya?

Bienvenid@s...

Aunque en los últimos años ha mejorado considerablemente la disponibilidad de productos sin gluten y su precio, todavía parece lejana la posibilidad de que los celíacos disfrutemos de la misma calidad de vida que las personas no afectadas por esta enfermedad. Uno de los mayores inconvenientes para seguir una dieta sin gluten es comer fuera de casa: desde que me diagnosticaron la enfermedad, lo que más hecho de menos cuando hago turismo es la posibilidad de comer algo rápido, recién hecho y barato en cualquier lugar. Para lograrlo, los celíacos contamos generalmente con dos opciones:
  1. Ir a los escasos restaurantes que te garantizan platos 100% libres de gluten, aunque todo sea dicho, el 100% de ellos suelen ser carísimos.

  2. Convertirte en una especie de caracol que carga con la comida a sus espaldas; esta última opción se complica si tu aventura va a durar más de una semana o si viajas a países que no permiten introducir alimentos.

Por eso, el objetivo de este blog es proporcionar información sobre dónde encontrar productos sin gluten a bajo coste alrededor del mundo, aliviando el peso de nuestras maletas y degustando la gastronomía local en la medida de lo posible.

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