Lisboa


Había oído opiniones muy dispares sobre Lisboa, pero sin duda a mi me ha parecido una ciudad increíble. Respira modernidad, aunque conserva el encanto de siglos pasados, la gente es amabilíiiiiiisima y se desviven por ayudarte, y en cuanto a la comida ninguna queja.

Tiendas y supermercados
Como en España, en la mayoría de farmacias (Farmácias) y lo equivalente a las herboristerías (Ervanárias/Dietéticas) encontraréis productos sin gluten de casas especializadas. Os será fácil encontrar estos productos en tiendas Celeiro Dieta puesto que están por toda la ciudad. También podréis ir a los siguientes supermercados: Continente, El Corte Inglés, Jumbo, Minipreço, Pingo Doce...

Comida rápida
Comer en Lisboa es bastante barato: el precio medio oscila entre los 7-10 euros, e incluye primer y segundo plato, postres, bebida y café. Así pues, no es muy complicado encontrar un buen sitio.
Único inconveniente: el tema de la celiaquía no es nada conocido. No intentéis explicar en qué consiste porque probablemente vuestro esfuerzo sea en vano…como mucho mencionar la palabra enfermedad y directamente dar una tarjeta con los productos que podéis comer y los que no. ¡Tener en cuenta que este consejo viene dado por la mismísima página de la asociación de celíacos de Portugal! Y no se equivocan…En la misma página de la asociación también encontraréis un listado de platos típicos teóricamente permitidos. Además podéis memorizar algunas palabras que os harán la vida más fácil: asado (grelhado/assado), maíz (milho), etc. Aquí van algunos sitios en los que comí a buen precio:

Por toda Lisboa encontraréis pastelerías-cafeteía-snack en los que hacen platos combinados por unos 5-6 euros, aunque hay que ir con cuidado porque hacen hay bastante “fritanga”…. En los que yo estuve pedí bistoque grelhado (bistec de ternera a la parrilla con huevo encima) y me lo sirvieron acompañado de arroz, ensalada y patatas. Por cierto, las batatas en Portugal suelen ser artesanas (nada de congeladas). Además lo rematé con arroz con leche (arroz doce) que en teoría es un postre apto para celíacos. Me aseguraron que la comida era gluten free y la verdad es que mi estómago no tuvo ninguna queja.

Una buena opción para tomar algo por la tarde es ir a la Alfama y tomar una copita de Ginjinha (licor de cereza, por 1 euro) mientras te relajas escuchando fados...

En esta ciudad debo que hacer de nuevo una mención especial al sr. McDonald’s de Portugal: en su carta, además de las ya conocidas patatas y ensaladas (por cierto, mucho mejores que las de España), también tienen sopas sin gluten, y es que los portugueses son grandes amantes de los caldos.
Por último, haré una mención especial a un restaurante en el que comí increíblemente bien: restaurante Tascardoso (rua seculo, 242). Es un local bastante minúsculo en el que podréis degustar la gastronomía tradicional a un precio excelente. Repetí dos veces. La primera noche cené: sardinas asadas, acompañadas de patatas hervidas, ensalada, aceitunas, queso tradicional, vino, y de postre melón. ¿Cuánto? 11 euros, y no pude terminar…El segundo día lo mismo, pero cambié las sardinas por carapaõ, que según el camarero es el “padre de la sardina” (yo todavía no he descubierto de que pescado se trata, la verdad…).


Volvería sin pensármelo...

París

París precisamente no es un paraíso para celíacos: el etiquetaje de los alimentos deja mucho que desear, los sitios donde poder comer sin gluten son escasos y caros, y la “gran simpatía” de los parisinos no suele resultar de mucha ayuda para aclararte con la comida (aunque hay de todo en todos los sitios…).

Tiendas y supermercados
Podréis encontrar comida sin gluten en farmacias (pharmacies) o tiendas dietéticas (magasins de produits de régime). Concretamente, en las tiendas Naturalia, con multitud de franquicias por toda la ciudad, encontraéis sobre todo bollería y pan de Dr. Schär, Sanavy, Glutabye, etc.; exactamente los mismos productos que encontramos en España. Otras tiendas parecidas son La Vie Claire y Biocoop.
Algunos supermercados, como Monoprix o Casino, tienen pan, galletas, madalenas, etc. sin gluten (buscar la marca allergo).

Comida rápida

La cosa está difícil…aunque veréis multitud de creperies, sitios donde comprar bocadillos y excelentes pastelerías, la verdad es que poca cosa es apta para celíacos. En teoría, los macarons (un tipo de dulce) son por naturaleza sans gluten aunque hay que ir con cuidado con la contaminación cruzada…Los de la confitería Ladurée son especialmente famosos; eso sí, son caros, por eso una opción más barata para el postre es comprar fruta fresca en cualquiera de las muchas frutería que hay en París. Seguramente, no os quedará más remedio que preparar vuestra propia comida o ir a un restaurante gastando un poco más.
Una buena opción en París son las omelletes (tortillas). Aunque las suelen preparar con los ingredientes que tú elijas (además del huevo, obviamente...), avisar de que sois celíacos. Eso sí, aunque probablemente será lo más barato que encontréis, la factura seguro que no baja de 10-15 euros....
También podéis visitar la web de la asociación de celíacos francesa con más información con restaurantes aptos para celíacos (sobre los 25-30 euros...). Son muy pocos los que hay, por eso si decidís ir a establecimientos fuera de la lista os recomiendo platos sencillos como entrecots y una especie de ensaladas que hacen donde añaden patatas fritas con ajo y perejil (¡¡buenísimas!!). Eso sí, avanzaros siempre y pedir todo sin salsa porque las ponen por todos los sitios... y por si a caso sin croutons (daditos de pan).
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